El Senasa confirmó un caso de influenza aviar H5 en un establecimiento de gallinas ponedoras. Se activaron medidas de control sanitario y se frenaron las ventas externas de productos avícolas.
La Argentina decidió suspender sus exportaciones de productos avícolas tras detectarse un brote de influenza aviar altamente patógena (IAAP) H5 en gallinas ponedoras de un establecimiento ubicado en Los Toldos, provincia de Buenos Aires.
El diagnóstico fue confirmado por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), luego de que el predio reportara síntomas compatibles con la enfermedad. Las muestras analizadas arrojaron resultado positivo y se activaron de inmediato los protocolos de emergencia.
Medidas sanitarias y control del brote
Entre las disposiciones adoptadas se estableció una Zona de Control Sanitario de 3 km, con medidas de bioseguridad y restricción de movimientos, y una zona de vigilancia de 7 km, donde se realizan monitoreos y controles epidemiológicos.
Las acciones incluyen el despoblamiento de las aves infectadas, su disposición final y la desinfección de las instalaciones. El Senasa aclaró que la zona no constituye un área de gran producción avícola, lo que limita el impacto productivo del caso.
Impacto en el comercio internacional
Argentina notificará el caso a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y suspendió temporalmente las exportaciones hacia los países con acuerdos de libre de enfermedad. Sin embargo, gracias al esquema de zonificación, podrá seguir comerciando con aquellos Estados que reconocen este sistema de control.
Según la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina, en el primer semestre del año el sector exportó 12,4 millones de toneladas por un valor de 14,6 millones de dólares.