El gobernador bonaerense cuestionó el plan económico de Javier Milei, al que acusó de desindustrializar el país y paralizar la economía real.
Axel Kicillof volvió a apuntar con dureza contra la gestión de Javier Milei, a la que calificó de “plan desindustrializador” que genera “salarios bajos y poco empleo”. El mandatario bonaerense advirtió que la economía real está prácticamente paralizada, afectando a sectores clave como el turismo, la gastronomía, la hotelería, la pesca y la industria textil.
“Este plan tiene dos sintonías. Una es la macro, donde Milei dice que estabilizó. La otra es la micro, que es la vida de la gente: si tiene laburo, si puede comprar comida, pagar remedios, nafta o servicios. Eso, para él, no es problema”, lanzó en una entrevista televisiva.
Kicillof denunció que el país atraviesa “una enorme bicicleta financiera” con el dólar planchado y tasas al 50%. “El objetivo de Milei es desindustrializar la Argentina. Lo vemos en la provincia: todo parado, no anda nada”, remarcó.
Elecciones y llamado al voto
De cara a las legislativas de septiembre, el gobernador llamó a los bonaerenses a votar para ponerle freno al Presidente: “Necesitamos compañeros que vayan a la Legislatura y al Congreso a votar en contra de estas barbaridades que hace Milei. No se trata de listas, se trata de ponerle límites”.
Obra pública frenada
Kicillof también resaltó que la provincia continúa con obras a pesar de la falta de apoyo nacional. “Este miércoles entregamos 52 viviendas. Tenemos 8.000 en construcción. Cuando asumimos, eran solo 80 por año”, explicó. Y cuestionó al Gobierno nacional por paralizar 16.000 viviendas y más de 1.000 obras de agua, cloacas y centros de primera infancia.
“Si continúa este chiste de cero obra pública, vamos a tener dos años sin obras. Nunca pasó en la historia argentina”, advirtió.
Escándalo por Spagnuolo
El mandatario bonaerense también cargó contra Diego Spagnuolo, exfuncionario de la Agencia Nacional de Discapacidad, envuelto en el escándalo de los audios de presuntas coimas. Recordó sus polémicas frases contra familias con hijos discapacitados y remarcó la contradicción: “Decía que pagar peaje era obligación, y ahora resulta que él cobraba el peaje”.
“Estos hechos muestran un patrón de comportamiento preocupante en alguien que debía garantizar derechos y no complicar la vida de familias vulnerables”, concluyó.